Se denomina plato de ducha o receptáculo al artefacto sanitario prefabricado que se coloca en el piso definiendo  el espacio de ducha y para recibir el agua de baño orientando su desagüe.

Hasta no hace mucho había en el mercado receptáculos de porcelana. Su alto precio y su peso los fueron desplazando hacia los más livianos y prácticos de fibra o acrílico hasta hacerlos desaparecer. Estos tipos no son una opción económica pero es indudable que tienen una muy buena imagen y son muy elegantes.

Los de acrílico son más brillantes que los de fibra. Requieren una terminación antideslizante ya que la superficie es muy lisa. Se rayan con bastante facilidad por lo que hay que tener especial cuidado.
También hay de chapa metálica esmaltada. Son más resistentes pero tienen problemas si el enlozado se rompe, deja el metal expuesto y por consiguiente se oxidan.

Por su forma los platos tienden a ser planos. Solo cuentan con un borde perimetral muy bajo que obliga a colocar una mampara como cerramiento. ¡Naturalmente no es un problama para nosotros! Pero hay que considerarlo. Las cortinas de baño no llegan a “pegarse” ya que no tienen superficie vertical para hacerlo y va a salir agua inevitablemente.

Los receptáculos tienen dos desventajas.  Una es que limitan las posibilidades de diseño del baño ya que vienen en dimensiones fijas que, si bien son variadas, ponen un obstáculo en algunas ocasiones.

Pero el gran problema es la ignorancia a la hora de instalarlos. Estos artefactos tienen que estar asentados sobre una base rígida de manera completa. Y no solamente arena ya que es un material que va a aplastarse y reacomodarse cuando la ducha se ponga en servicio. El plato no debe ser sometido a flexión cuando nos paremos sobre él. Para que esto no suceda la base debe ser de cemento y arena (mezcla conocida como concreto) que una vez endurecido no va a deformarse. Los instaladores no hacen esto casi nunca y después al aplicarles peso flexionan desprendiéndose de las paredes y generando espacios para filtraciones.

Hay algunos receptáculos especialmente altos que tienen una estructura metálica como soporte pero que no alcanza a darle la suficiente rigidez que es necesaria. ¡Claro que para rellenar tanto volumen es indispensable tomarse el trabajo de hacer una mampostería por debajo! Pero si no se hace habrá consecuencias negativas.

Si este problema es resuelto y el instalador lo coloca con responsabilidad los platos de ducha son una opción muy adecuada. Pero si no es así te puede traer un dolor de cabeza.

Por todo lo expuesto Mamparas Box no comercializa estos artefactos y, si querés tener uno, tenés que buscarlos en empresas que vendan sanitarios.

La alternativa del pediluvio.

En nuestro país se ha popularizado la construcción de pediluvios (del latín, pedi que significa  pies y luvium que es lavar) construidos en mampostería de ladrillos huecos o comunes que se revisten con el mismo cerámico o porcelanato del piso. Son cordones de no más de diez centímetros de ancho y de alto que resultan muy eficientes y prácticos. Sobre ellos se pueden montar mamparas sin problema y permiten diferenciar y encerrar los límites del espacio de ducha favoreciendo la correcta ejecución de la pendiente. De acuerdo a nuestra experiencia este tipo de solución resulta muy adecuada en términos funcionales y no implica un alto costo.

¿Cuál es la dimensión adecuada para un pediluvio?

El ancho recomendado es entre 8 y 12cm. En esa medida una mampara entra perfectamente bien y no resultan tan voluminosos.
Con respecto a la altura consideremos que no debe exceder los 15cm ya que es la altura a la que estamos acostumbrados a levantar el pie en un escalón. Tampoco es necesario que sean demasiado elevados. Entre 8 y 10cm está bien y es suficiente como barrera para el agua.
De todas formas no hay una dimensión precisa y, si el gusto del propietario lo define más alto o más ancho, no hay ninguna razón que indique lo contrario.

En síntesis decimos que, si bien no nos oponemos al uso de platos de ducha, entendemos que hay dificultades de instalación que deben ser salvadas para no tener problemas en el futuro.

La decisión estética es naturalmente muy subjetiva y será evaluada por cada usuario.

¡Ustedes lo definen! Pero no eludan las reglas de instalación adecuadas.

Mamparas Box
Todos los derechos reservados.